La producción de semillas requiere el conocimiento práctico de un conjunto de técnicas. Según la especie o grupo de especies de semillas que se quieran producir, las dificultades son muy variables. Para ello, se necesita una especialización por parte de las empresas productoras. Eso significa, conocer las diferentes fuentes de semillas, las formas de recolección para su posterior producción, entre otras cosas. En este blog te explicaremos los pasos necesarios para llevar a cabo una producción de semillas correctamente. ¡No te lo pierdas! Además, si quieres especializarte en el sector, puedes realizar nuestro Curso en Producción de Semillas y Plantas en Vivero.

Bases principales de la producción de semillas

Muchos países no pueden beneficiarse de la producción de semillas ni de sus ventajas. Esto se debe a una combinación de factores que provocan una producción ineficiente de semillas, los sistemas de distribución y garantía de calidad. También limitan este proceso, la falta de políticas correctas. Por ese motivo, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), trabaja para mejorar y fomentar los vínculos entre los sistemas de mejoramiento y los de semillas.

Existen muchos grupos involucrados en la producción, distribución y comercialización de semillas. Estos son agricultores, productores de semillas, pequeñas y grandes empresas, sociedad civil, mercados locales, entre otros.

Métodos de producción

Para llevar a cabo la producción se necesita conocer los métodos que existen para producir semillas, así como la aplicación en diferentes plantas. También hay que saber determinar las condiciones que requiere cada una para ser almacenada sin perder su alta calidad. Realizar todas estas tareas, y algunas otras más, correctamente, se puede conseguir hasta el 70% del éxito de la actividad agrícola.

Existen diferentes métodos teniendo en cuenta la especie de planta y el tipo de semilla. Por ejemplo, la semilla en cereales y oleaginosa es el producto agrícola normal. En cambio, en algodón y hortalizas de fruto, es un producto secundario que se obtén con el producto agrícola normal.

No obstante, la producción tradicional de semillas incluye las siguientes etapas:

Siembra

La siembra consiste en arrojar y esparcir las semillas en un terreno libre de enfermedades. Pues, el tratamiento y preparación previo de la tierra es sumamente importante. Los procesos más utilizados son la pasteurización y la esterilización.

Cosecha

Cuando una semilla se puede separar de la planta sin perjudicar su germinación significa que está madura. Existen diferentes procedimientos de separación de la semilla y el fruto.

Selección y limpieza

Durante la cosecha de las semillas no se pueden eliminar totalmente. Eso significa que deben ser transportadas a la planta con pedazos de tallos, vainas, paja, semillas inmaduras y de otros cultivos. Para poder separar estos contaminantes, es necesario tener en cuenta sus características físicas para realizar la operación.

Secado

La semilla se debe secar antes de ser guardada y almacenada. De lo contrario, la semilla podría pudrirse.

Almacenamiento

Después de extraer y secar las semillas es necesario mantenerlas en las mejores condiciones posibles para asegurar al máximo su poder germinativo y otros parámetros de calidad. Este periodo puede ser relativamente corto o incluso durar varios años. Este tiempo corresponde al tiempo total comprendido entre su maduración y el final de las operaciones de siembra.

Envases, etiquetas y transporte

Es obligatoria comercializar las semillas en envases nuevos y etiquetados según su categoría. El tipo de material se desarrolla teniendo en cuenta el nivel de desarrollo de la industria, la maquinaria de envasado, la protección necesaria contra accidentes como lluvia, insectos, transporte, etc.