Los envases biodegradables han aparecido en nuestras vidas desde hace unos años como consecuencia del fuerte impacto que ha tenido el plástico en el ecosistema y medioambiente. De hecho, se estima que hasta la fecha, la humanidad sólo ha podido reciclar un 5% de todo el plástico que ha producido. ¿Terrible, verdad? Por suerte, la tendencia hacia un consumo mucho más sostenible cada vez coge más fuerza en la sociedad. La hora del cambio ha llegado.
Si te gustaría aprender más sobre la influencia de los plásticos en nuestro entorno y alimentación ¡sigue leyendo! En el post de hoy, te contamos todo lo que necesitas saber sobre los envases biodegradables y cuáles son sus pros y contras. Y recuerda, si estás pensando en especializarte en un sector con alta demanda, no te pierdas nuestro Máster en Biotecnología Alimentaria + Máster en Técnicas Bioquímicas y Análisis Microbiológicos en Alimentos.
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Envases biodegradables: ¿Los nuevos envases del futuro?
En la actualidad, son muchas las empresas que están trabajando para diseñar envases menos contaminantes, pensando en el futuro del planeta. Para hacernos una idea, cada español genera una media de 150 millones de residuos de envases pero lamentablemente, no todos se pueden reciclar.
¿Pero qué son los envases biodegradables? En pocas palabras, son aquellos que han sido creados a partir de materias primas orgánicas como por ejemplo: la celulosa, los cultivos alimentarios o los desechos. A diferencia de los envases plásticos, una vez nos deshacemos de ellos y se han convertido en basura, empiezan su proceso de degradación. Esto se debe a que al entrar en contacto con el medioambiente, pierden de forma paulatina sus propiedades y estructura hasta convertirse en biomasa. Este proceso a diferencia de los envases compostables tarda algunos años en terminar el ciclo, por ello, desde IEQFB siempre recomendamos el uso de envases biodegradables compostables.
Pros y contras de los envases biodegradables
El mercado de los envases fabricados con bioplásticos es un mercado alternativo o de sustitución, ya que pretende sustituir un porcentaje de envases convencionales por envases biodegradables. En un futuro próximo, se estima que la producción llegará a sustituir hasta un 50% de los plásticos de origen sintéticos y es que los beneficios del uso de envases biodegradables para el almacenamiento de productos cada vez son más.
Ventajas:
- Ayudan a preservar el medio ambiente reduciendo la huella de carbono
- No liberan agentes tóxicos, elementos químicos o materiales perjudiciales para la salud
- Son ideales para la conservación de alimentos. Mantienen el sabor y el aroma
- Se eliminan rápidamente por la interacción de los microorganismos
- Se crean a partir de materias primas renovables. Son reciclables y se les puedes dar una segunda vida
- La tecnología actual permite su diferenciación de los envases plásticos a través de la separación automática
- Ya se usan en el mercado español, siendo tendencia el almidón para bolsas y el PLA para envases rígidos
- Las empresas que fomentan su uso son valoradas positivamente por los consumidores (marca sostenible y eco friendly)
Desventajas:
- No existe una red de recogida de envases biodegradables específica
- No se distingue fácilmente a ojo por su imposible diferenciación de los envases convencionales
- Actualmente es costoso adaptar todos los procesos actuales de reciclado mecánico
- Sólo las bolsas de almidón son 100% biodegradables bajo los criterios de la norma EN14855