La siembra microbiológica es una técnica esencial en microbiología que permite cultivar microorganismos en un medio controlado para su estudio y análisis. Estas técnicas de cultivo son fundamentales en laboratorios de investigación, hospitales y centros de diagnóstico, ya que permiten la identificación de bacterias, hongos y otros microorganismos causantes de enfermedades o que se emplean en aplicaciones biotecnológicas. Conocer los tipos de siembras microbiológicas ese esencial para comprender los distintos enfoques que se pueden utilizar en función del propósito del análisis.

Estudia el máster en microbiología clínica y conviértete en un experto en el ámbito.

¿Qué es un cultivo microbiológico?

Un cultivo microbiológico es un proceso mediante el cual se fomenta el crecimiento de microorganismos en un ambiente controlado, generalmente en medios de cultivo que contienen nutrientes esenciales para su desarrollo. El objetivo de los cultivos microbiológicos es aislar y aumentar la cantidad de microorganismos presentes en una muestra, lo que permite su identificación, análisis y, en algunos casos, su manipulación genética. Los cultivos pueden realizarse en medios sólidos o líquidos, dependiendo de las necesidades del experimento y el tipo de microorganismo a estudiar.

Para llevar a cabo un cultivo microbiológico, los científicos emplean técnicas de esterilización y manipulación aséptica, ya que la contaminación cruzada con otros microorganismos podría alterar los resultados del análisis. Además, los medios de cultivo se diseñan específicamente para satisfacer las necesidades de distintos tipos de microorganismos, como bacterias, hongos o virus.

Descubre qué es la microbiología y cómo diferenciarla de la parasitología.

¿Cuáles son los tipos de siembras microbiológicas?

Existen varios tipos de siembras microbiológicas, y cada una de ellas se utiliza en función del propósito del análisis y del tipo de microorganismo que se quiere estudiar.

Siembra por estría

La siembra por estría es una técnica de aislamiento que permite obtener colonias individuales de microorganismos a partir de una muestra. En este método, se utiliza un asa de siembra (una herramienta en forma de alambre) para arrastrar una pequeñas cantidad de muestra sobre la superficie de un medio sólido en una placa de Petri. Durante el proceso, el asa se pasa varias veces en diferentes direcciones, de modo que los microorganismos se diluyan progresivamente. Esto facilita que en las últimas estrías aparezcan colonias individuales, que pueden aislarse y estudiarse de manera separada.

Siembra por agotamiento

La siembra por agotamiento es otra técnica de aislamiento utilizada para reducir la concentración de microorganismos en una muestra, de manera similar a la siembra por estría. En este caso, sin embargo, la muestra se extiende sobre toda la superficie del medio de cultivo en una placa de Petri, y el asa de siembra se esteriliza después de cada pasada. De este modo, se reduce la cantidad de microorganismos en cada pasada, lo que permite obtener colonias bien separadas y aisladas.

Siembra en profundidad

Este tipo de siembra permite cultivar microorganismos en el interior de un medio de cultivo sólido, en lugar de en su superficie. Para realizar esta siembra, se mezcla la muestra con un medio de cultivo líquido fundido (como agar) y luego se vierte en una placa de Petri o en un tubo de ensayo. Una vez que el medio se solidifica, los microorganismos crecen en el interior del agar y no en la superficie.

Matricúlate al máster en microbiología clínica

Siembra por extensión

Se utiliza para distribuir de manera uniforme los microorganismos sobre la superficie de un medio sólido. Para emplearla, se coloca una pequeña cantidad de muestra en el centro de la placa de Petri, y luego se utiliza una espátula esterilizada para extender la muestra en toda la superficie del medio. Esta técnica es útil cuando se quiere obtener un crecimiento uniforme en toda la placa, ya que permite la formación de una “alfombra” de microorganismos.

Siembra en placa de vertido

La siembra en placa de vertido es un método utilizado para cuantificar y aislar microorganismos. En esta técnica, una cantidad medida de la muestra se mezcla con medio de cultivo líquido fundido y luego se vierte en una placa de Petri. Una vez que el medio solidifica, los microorganismos crecen tanto en la superficie como en el interior de la placa.

Siembra en medios selectivos

Implica el uso de medios de cultivo diseñados para favorecer el crecimiento de ciertos microorganismos e inhibir el crecimiento de otros. Esta técnica es especialmente útil para aislar y estudiar microorganismos específicos en muestras complejas, como las obtenidas de suelos, aguas o ambientes clínicos.

Siembra en medios diferenciales

Esta técnica permite distinguir diferentes tipos de microorganismos en función de sus características bioquímicas. Estos medios contienen indicadores que cambian de color o producen reacciones visibles en respuesta a las actividades metabólicas de los microorganismos, permitiendo diferenciarlos entre sí. Se trata de un tipo de siembra común en laboratorios de microbiología clínica para identificar especies bacterianas en función de sus capacidades metabólicas.

¿Te interesa saber más? Nuestra especialización en microbiología clínica te dará todas las claves para enfocar tu trayectoria hacia este ámbito del laboratorio. ¡Aprovecha las ventajas de estudiar online con el Instituto Europeo de Química, Física y Biología.

Máster en Microbiología Clínica