Los productos cárnicos son los alimentos derivados de la carne. Principalmente, incluye al ganado bovino, porcino, ovino, aves de corral y, en menor medida, otras especies como conejos o cabras. Son un producto muy popular en la dieta de muchas personas y entender mejor qué son y cómo se clasifican es importante para cualquiera con interés en saber más sobre la biotecnología alimentaria.

Te contamos todo lo que necesitas saber sobre esta área y algunos ejemplos para que, cuando termines de leer este blog, sepas identificar con claridad los más importantes. ¿Quieres saber más? Fórmate en biotecnología alimentaria y accede a un programa formativo avanzado y de calidad.

¿Qué son los productos cárnicos? Ejemplos

Los productos que se hacen a partir de la carne se llaman productos cárnicos. Incluyen una amplia variedad de alimentos como los cortes frescos o los productos más elaborados, procesados y curados. La carne fresca es un ejemplo de producto cárnico: se consume, generalmente, después de cocinarse a la parrilla.

Los embutidos son otro ejemplo de productos cárnicos. Son procesados y suelen pasar por un proceso de curación antes de su consumo. Además, encontramos las salchichas, los chorizos o el jamón cocido como más ejemplos, además de los fiambres que son parecidos; trozos de carne cocidos y generalmente en lonchas delgadas ideales para sándwiches y bocadillos.

También tenemos los productos curados y los enlatados. En el caso de los curados, incluyen el jamón o el salami, por ejemplo, que son carnes sazonadas y curadas durante un período de tiempo. Su objetivo es desarrollar sabores intensos y prolongar su vida útil. Los enlatados, en cambio, son carnes procesadas y enlatadas para facilitar su consumo y podemos encontrar ejemplos como el paté o la carne en conserva.

Clasificación de los productos cárnicos

Podemos catalogar los productos cárnicos de varias maneras: en función de su origen, procesamiento o contenido de grasa. Veamos cómo se clasifican los productos cárnicos:

Según su procesamiento

En función de cómo se procesen, encontramos:

  • Productos frescos: es carne sin procesar, como por ejemplos los cortes de bistec y los filetes.
  • Productos procesados: estas carnes sí que han sido sometidas a varios procesos, como la curación, el ahumado, el salado o el enlatado.

Según su contenido de grasa

Seguro que has oído hablar en más de una ocasión de trozos de carne magra o grasa. Pues bien, esto se refiere al contenido de grasa que tenga un producto de origen animal. Las carnes magras tienen poca grasa, como la pechuga de pollo o el solomillo de ternera, mientras que las carnes grasas tienen un alto contenido de grasa intramuscular, como las costillas de cerdo o las chuletas de cordero.

¿Cuáles son los productos cárnicos más consumidos?

La popularidad de este tipo de productos cambia según la región y la cultura pero, a grandes rasgos, estos son los productos cárnicos más consumidos:

  • Pollo. Es una de las carnes más consumidas por su versatilidad en la cocina, el sabor suave y el bajo costo de producción.
  • Cerdo. Muchas culturas aprecian la carne de este animal, que podemos cocinar en forma de chuletas, costillas, jamón y salchichas.
  • Ternera. El sabor distintivo y la textura tierna de la carne de res es lo que convierte sus cortes de carne en uno de los más populares.
  • Jamón. Tanto el jamón cocido como el curado son productos cárnicos muy consumidos, ya sea como parte de un bocadillo o como acompañamiento en platos principales y entrantes de todo tipo.
  • Salchichas. Las salchichas son uno de los productos más apreciados en todas sus formas. Esto se debe a su conveniencia y la variedad de sabores que presenta.

Los productos cárnicos son una parte importante de la dieta humana y una fuente de proteínas de alta calidad y de nutrientes esenciales. Por ello, aprender a elaborarlos con los más altos estándares de seguridad es fundamental para cualquier interesado en formar parte de la industria alimentaria.

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